viernes, 9 de marzo de 2007

"No me asusta la posibilidad de tener que gobernar la Provincia"

A continuación publicaré una nota realizada para el Diario Clarín, publicada el 24/12/06.
Espero la encuentren de interés, y aguardo los comentarios que deseen realizar:

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"No me asusta la posibilidad de tener que gobernar la Provincia"

En una entrevista exclusiva con Clarín, habló por primera vez del escenario que se abre con su candidatura bonaerense. Su opinión sobre Kirchner, Cristina, la inseguridad y Solá.

—¿Siente que su posible candidatura a gobernador bonaerense es una reivindicación, luego de las críticas que recibió del mismo Gobierno?

—Yo siento que tengo que seguir honrando la responsabilidad institucional que tengo como vicepresidente. Lógicamente, siento que el esfuerzo valió la pena y encaramos el último año con renovadas expectativas. Me gratifica desde lo humano, más allá de lo político, la posibilidad de seguir sirviendo a mi país y poder acompañar al Presidente en lo que considera que puedo ser más útil al proyecto.

—Precisamente, desde lo humano podría pensar que, al final, lo necesitaban más de lo que parecía al principio.

—No, sería un gesto de soberbia. Creo que en los momentos duros uno no tiene que ser quejoso; y en los momentos donde puede cambiar la expectativa, tiene que tomar las cosas con los pies en la tierra, con humildad y con mayor compromiso. Ese es el faro que ilumina todas mis acciones.

—Un dirigente que no lo estima decía: "Al final, pasaron cinco años del 'que se vayan todos' para que venga Scioli".

—Yo debo ser de los dirigentes más nuevos y con más experiencia de la política argentina. Me fui fogueando en los momentos difíciles. En enero de 2002 nadie quería ir a la Secretaría de Turismo y Deporte, me decían "¿qué vas a poder hacer?". Pero yo no me quedé quejándome de que no podía hacer. Lo mismo como vicepresidente, no me quedé tocando la campanita en el Senado.

—Entonces, ¿usted es la nueva política de la que hablaba Kirchner cuando asumió?

—No me gusta hablar en esos términos de nueva política, vieja política... Pero por supuesto, nosotros encaramos la renovación.

—Pero si hay dirigentes que no expresan esa renovación son los intendentes bonaerenses, ¿no?

—Esas consideraciones no me gustan. Es la gente, a través del voto, la que tiene que opinar. El mérito de mi carrera es haber escuchado mucho a la gente.

—¿Eso quiere decir que en la Provincia no hay un pedido de cambio?

—La Argentina tiene que seguir cambiando. En la Provincia hoy está gobernando Felipe Solá, con quien yo tengo una relación de respeto, de afecto, de reconocimiento. Es un hombre que tomó la Provincia en momentos difíciles y que la está sacando adelante. Yo, como vicepresidente, apoyo al gobernador. Sabemos de las batallas electorales que dio. En el 2003 fue uno de los primeros en subirse a nuestro proyecto.

—¿Está confiado en la herencia que le va a dejar?

—Estoy confiado en que Felipe ha demostrado ser un administrador responsable. Esto me motiva especialmente, y la confianza que tengo en que ante la oportunidad que tenga voy a poder seguir haciendo grandes cosas.

—Pero en su entorno dicen que salió muy preocupado de la reunión de gabinete que compartió con Solá

—No, nada que ver. Mentira, todo lo contrario. La Provincia tiene por delante posibilidades extraordinarias, como el resto del país.

—Con la pobreza, la inseguridad, la Policía bonaerense, ¿no le asusta la posibilidad de gobernar la Provincia?

—No, no me asusta la posibilidad de tener que gobernar la Provincia. Porque si hay algo que me gusta es resolver problemas y hacerme cargo de las cosas. Aparte, estamos atacando las causas profundas de estos temas. El tema de la seguridad, los programas de inclusión, el tema educativo, la recuperación del espacio público... ¿Qué es una Argentina más segura? Que el que estudia también tenga después un laburo.

—Pero usted venía trabajando en un proyecto para la Ciudad, que tiene una problemática más urbana. En la Provincia hay cuestiones mucho más pesadas.

—Vengo sosteniendo desde hace mucho tiempo que la Ciudad no soluciona su problema en forma aislada si no trabaja con la Nación y con el conurbano. A la vez, la Provincia necesita trabajar en forma integral con la Nación y con el resto de las provincias. ¿Cuántas camas de los hospitales porteños están ocupadas por gente de la Provincia? Entonces, hay que trabajar en conjunto.

—¿Está en condiciones de ser candidato en la Provincia?

—Yo no voy a hablar de cuestiones electorales...

—Se lo preguntamos desde el punto de vista del domicilio....

—Sí, pero no quiero hablar. El año que viene será el año de todas estas cuestiones electorales.

—¿A quién prefiere como candidato presidencial en 2007, a Kirchner o a Cristina?

—El presidente hará una evaluación y lo definirá. Evidentemente, Cristina tiene un prestigio internacional y una capacidad muy reconocida. Y bueno, sabemos lo que significa el Presidente en términos sociales y económicos para el país y para el liderazgo latinoamericano. Este es un trabajo en equipo, y el capitán es el Presidente. Se resolverá el año próximo. Lo importante es que este es un espacio político que tiene candidatos para los distintos distritos. Yo tengo que ocuparme de lo mío. ¿Saben cuál es el secreto de mi carrera política? No me distraigo en cuestiones que tienen que ver con la rosca política.

—Pero pareciera que tiene una relación más difícil con Cristina que con Kirchner.

—No, nada que ver. Las cosas que han dicho... Ni vale la pena aclarar lo obvio. Mi satisfacción es que me consideran y el Presidente pone en valor mi trabajo.

—¿Ya es kirchnerista?

—Al ser vicepresidente de Kirchner... El Presidente gobierna para todos los argentinos, teniendo en cuenta un amplio abanico de sectores de la vida política. Esta concertación constructiva a la cual ha convocado es un paso adelante y una madurez política fantástica.

—Gobierna para todos los argentinos, pero cuando alguien del equipo asoma un poco la cabeza, como pasó con Lavagna, termina afuera.

—Bueno, él habrá considerado que habría cumplido una etapa. Y punto. La Argentina siguió creciendo, generando trabajo. Bueno, el Presidente es el que pone y saca a los ministros. Esto pasa en todos los gobiernos.

—¿Cuándo va a terminar de tomar una determinación sobre su candidatura?

—Cuando el Presidente defina la estrategia electoral. El es el que fija los tiempos.

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